Esta pintura de James Whistler es considerada una pieza icónica del arte estadounidense. Bueno, ironicamente icónica del arte estadounidense, porque, aunque Whistler era estadounidense, este retrato fue pintado en Londres y se vendió en París, donde se encuentra actualmente en el Museo de Orsay. La música era una influencia importante para Whistler y generalmente titulaba sus obras con términos musicales tales como "arreglos", "armonías" o "nocturnos", lo que recalca la preponderancia de la armonía tonal en su arte. Esta pintura en particular fue creada porque, después de que una modelo no se presentara a la cita para posar, Whistler fue con su madre y le sugirió realizar su retrato.


Retrato de la madre del artista
óleo sobre lienzo • 144.3 × 162.4 cm