Serpientes II

Klimt retornó a la temática de “mujeres sensuales en el agua” en dos obras conocidas como Serpientes de Agua I y Serpientes de Agua II. Serpientes de Agua I no es una pintura al óleo, y su pálido e inusual colorido se debe en parte al medio utilizado. No difiere en gran medida de los dibujos preliminares que Klimt empleó como referencia, salvo por la adición de la pintura dorada y la hebra de hojas verdes y doradas que se enreda en torno a los cuerpos de las mujeres. El inequívoco abrazo lésbico de sus modelos podría haber parecido inaceptable si se hubiera presentado directamente como un retrato. Sin embargo, el haber renombrado la obra y haberle dado un tema alegórico, añadiendo la serpiente marina detrás de los cuerpos y adornando todas las superficies con patrones y oro, permitió a Klimt exhibir su obra en Viena sin temor a la censura.