Federico da Montefeltro fue uno de los condottieri más exitosos (los líderes de soldados mercenarios o caudillos) del Renacimiento italiano, y el señor de Urbino hasta su muerte. Federico perdió su puente nasal y su ojo derecho en un accidente del torneo, lo que explica su fisonomía especial. Fue apodado "La luz de Italia", por sus contribuciones a la cultura ilustrada, por ejemplo, apoyó el desarrollo de artistas finos, incluida la formación temprana del joven pintor Rafael. Junto con este retrato, Piero pintó a la esposa de Montefeltro, Battista Sforza, ambas pinturas están ahora en la Galería Uffizi en Florencia.




Federico da Montefeltro
Aceite y témpera en el panel •