Pequeño caballo

Maestro indiscutible de la xilografía, Alberto Durero es uno de los grabadores y pintores renacentistas del norte de Europa más celebrados. Sus xilografías y grabados originales contienen detalles exquisitos y una elaborada imaginería que se basa en ideas filosóficas y religiosas. A los quince años, Durero trabajó de aprendiz del principal pintor de la ciudad, Michael Wolgemut. En 1490, al final de su aprendizaje, pasó un tiempo viajando (Wanderjahre) con el objetivo de aprender de los maestros de su campo. En 1492 llegó a Colmar, donde tenía la intención de estudiar junto a Martin Schöngauer, un importante grabador y pintor de su época; no obstante, Schöngauer murió poco después de que Durero llegara. Fue allí y en otros viajes a Balisea, Núremberg e Italia donde aprendió y comenzó a perfeccionar su oficio.