Egon Schiele fue el 'enfant terrible' del vanguardismo vienés. Sus obras expresionistas de temas como la sexualidad en ciernes, la muerte y la descomposición escandalizaron a la Viena del siglo XX en sus primeros años. A partir de 1915, cuando se casó con Edith y pintó este retrato de ella, su obra cambió, pues perdió su mella de línea distintiva y se volvió más dulce y suave. La tragedia de este retrato se encuentra en el hecho de que la pareja moriría debido a la pandemia de gripa española que ocurrió sólo tres años después.




Retrato de Edith Schiele con un vestido de rayas
óleo sobre lienzo • 180 × 110,5 cm