El grabado muestra al artista protegiéndose de los búhos (símbolos de la locura) y los murciélagos (símbolos de la ignorancia). Posiblemente sea la voz de Goya en una discusión sobre la situación en España, donde vivió a principios del siglo XIX. La España de esa época tenía una sociedad muy católica, de mentalidad estrecha, donde la ignorancia y el fanatismo eran demasiado comunes para Goya. Un ejemplo de esto es que la Inquisición de España se cerró ¡apenas en 1820!


El sueño de la razón produce monstruos
aguafuerte y aguatinta • 21.6 x 15.2 cm