Como un marinero puritano de la fortuna, el segundo conde de Warwick fundó compañías en Virginia y el Caribe, ayudó a colonizar Connecticut, Massachusetts y Rhode Island, y se apoderó de barcos españoles en nombre del duque de Saboya y Charles I. Estas políticas hicieron que Warwick Lado con el Parlamento como comandante de la marina (desde 1642). A pesar de las alusiones a sus aventuras marítimas en la armadura y los barcos, Warwick lleva la vestimenta cotidiana de un aristócrata y la sonrisa ingeniosa por la que era conocido.


Robert Rich, Segundo Conde de Warwick
óleo sobre lienzo • 208 x 128 cm