Schiele fue un estudiante de Gustav Klimt cuya pintura escandalosa titulada El cardenal y la monja es un reflejo espejístico distorsionado de la famosa obra de su maestro - El beso. En la pintura de Klimt, el hombre y la mujer están en armonía, pero en la de Schiele todo parece violento - desde el movimiento del cardenal hacia la monja, hasta el rostro asustado de ella y sus manos rechazándolo. Esta pintura podría ser el reflejo distorsionado de El beso, pero definitivamente es un reflejo perfecto del nervioso estilo de vida de Ergon Schiele, el cual estuvo repleto de escándalos.




El cardenal y la monja
óleo sobre lienzo • 70 × 80,5 cm