Entre 1793-1794 Francisco Goya estaba en convalecencia. Completó un conjunto de once pequeñas imágenes pintadas en estaño. Conocidos como Fantasía e Invención, marcan un cambio significativo en el tono y el tema de su arte. Se trazan de los reinos oscuros y dramáticos de la pesadilla fantástica. Goya escribió que estas obras sirvieron "para ocupar mi imaginación, atormentada como está por la contemplación de mis sufrimientos". La serie, dijo, consistía en imágenes que "normalmente no encuentran lugar en las obras encargadas". Fuego de noche es una evidencia de que el mundo de Goya ya no era tan alegre y brillante como el que le habían requerido retratar en sus caricaturas de tapices de estilo rococó. Y la guerra peninsular que hizo que Goya creara Los desastres de la guerra estaba a punto de llegar.


Fuego de noche
óleo sobre lienzo • 50 x 32 cm