David utilizó la historia de Cupido y Psique para explorar el conflicto entre el amor idealizado y la realidad física. Cupido, amante de la bella mortal Psique, la visitaba todas las noches con la condición de que no descubriera su identidad. Cupido generalmente se representaba como un adolescente ideal, pero aquí David lo presenta como un desgarbado adolescente sonriendo burlonamente ante su conquista sexual. David se inspiró en diferentes textos antiguos, incluyendo un poema griego oscuro y recientemente publicado de Mosco, que describe a Cupido como un chiquillo malcriado de piel oscura, ojos centelleantes y pelo rizado.
Jacques-Louis David incluyó dos mariposas en esta pintura: una sobre la Psique dormida y la otra en la base del bastidor de la cama de la pareja.