Cassius Marcellus Coolidge
Los animales antropomorfizados siempre son populares, ¡incluso si a veces son realmente extraños! Nos encanta vernos reflejados de esta manera: está lo suficientemente cerca como para tocar la fibra sensible, pero lo suficientemente lejos para ser divertido. Nos sentimos cómodamente desafiados porque podemos reírnos y no tenemos que tomárnoslo demasiado en serio.
Esta pintura es una de las dieciséis de una serie llamada Perros jugando al póquer. Se creó después de que Coolidge (1844-1934) se inscribiera para trabajar para la agencia de publicidad Brown & Bigelow en 1903. La serie se produjo como parte de una campaña publicitaria de puros y miles de productos que los exhibían se difundieron por todo Estados Unidos.
Descrito como kitsch, ¿es incorrecto apreciar estas obras como arte? ¡Para nada! Muy a menudo, algo se vuelve más popular porque tiene un atractivo universal. En este caso una parodia del comportamiento humano nos hace reír porque nos identificamos con él en algún nivel. Un amigo necesitado también es muy accesible: no hay pistas o símbolos esotéricos, lo que significa que puede llegar a todo el mundo.
Dado que esta imagen nació como un anuncio, ha sido bastante bueno haber cruzado la división entre ese mundo y el mundo del arte. Si bien nunca se colgará en el Louvre, ¡ha logrado tener una vida bastante glamorosa!
- Sarah Mills
P.D. Haz clic aquí para ver más representaciones de perros en la historia del arte.
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